Ir al contenido

Requisitos para la cria

Criar perros, en especial razas como el Caniche Toy, va más allá de un simple interés. En la encrucijada entre requisitos legales y pasión por los animales, nuestro proyecto, aunque pequeño, entiende que la cría responsable implica un compromiso que se basa en integridad y amor. Cada dulce cachorro que llega a los hogares tiene detrás un proceso minucioso que implica licencias, regulaciones y una dedicación profunda al bienestar animal.


Tenemos pocas camadas al año, pero eso no implica que no se deba cumplir la legislación. Para inciar una actividad de este tipo se debe encontrar un terreno rústico con una distancia mínima de un kilometro de radio a cualquier vivienda, se solicita una compatibilidad urbanística y con ello se realiza un proyecto que debe incluir toda una serie de condiciones sanitarias y de bienestar animal, con ello se solicitan las pertinentes licencias de construcción y el proyecto debe tener supervisión y visto bueno de la veterinaria adscrita a la comunidad autónoma, tras ello y realizar la obra se realiza una nueva visita y se solicita el fin de obra. En siguiente término empiezan las solicitudes de licencia ambiental o de actividad, que deberá incluir un proyecto redactado por veterinario en el incluyan desde las vacunaciones hasta protocolos de entrada y salida de cada animal. De nuevo se realizar inspecciones y se concluye si la instalación es apta. Asimismo debe solicitarse la inscripción como núcleo zoológico en la comunidad autónoma si bien este paso es el mas sencillo una vez obtenida la licencia de actividad puesto que ya hay al menos tres veterinarios y técnicos que han supervisado la instalación. 


En este escenario, entender el concepto de núcleo zoológico es crucial. A menudo, se asume que tener un núcleo zoológico otorga automáticamente el derecho de criar animales. Sin embargo, la realidad es más matizada. Los núcleos zoológicos pueden tener propósitos diversos, desde la tenencia de animales hasta operaciones como hoteles caninos, centros veterinarios e incluso tiendas de peces. Cada categoría tiene sus propias regulaciones y restricciones. Para la cría de perros, el aspecto central es la licencia de actividad, un documento que garantiza que se cumplen rigurosamente las normas legales.


Sin embargo, la cría responsable va más allá de cumplir con lo establecido por la ley. Aunque las regulaciones establecen directrices generales para todas las razas, desde el diminuto Caniche Toy hasta el majestuoso Gran Danés, en nuestro enfoque particular en los Caniche Toy, los detalles son esenciales. Estos cachorros diminutos requieren atención meticulosa y cuidados especializados. Con bebés que pesan apenas sesenta gramos al nacer, nuestras instalaciones deben estar equipadas con recursos tales como incubadoras, suelo radiante y sistemas de control precisos de humedad y temperatura, como los nuevos domos que hemos implementado.


La ética también juega un papel primordial en nuestra labor de cría. Aunque la ley no imponga restricciones estrictas sobre el número de camadas o el descanso para las madres, nuestra perspectiva es diferente. Creemos que es fundamental permitir que nuestras perritas disfruten de una vida plena y feliz, en lugar de convertirlas en meras fábricas de cachorros. El bienestar de las madres impacta directamente en su calidad de vida y en la salud y vitalidad de los cachorros que traen al mundo.


Aunque navegar por la burocracia y los requerimientos legales puede ser desafiante, nuestra pasión por los animales es el motor que impulsa nuestro proyecto. Detrás de cada adorable cachorro hay una persona apasionada que se esfuerza por criar perros con cuidado y amor. La cría responsable es la manifestación palpable de nuestro compromiso no solo con la legalidad, sino con la ética y el bienestar de los animales que nos han sido confiados.


En resumen, criar Caniche Toy va más allá de cumplir con las regulaciones legales; es un acto de amor y compromiso hacia los animales que criamos. Desde la planificación inicial hasta el cuidado diario, nuestro enfoque se basa en proporcionar un ambiente enriquecedor y afectuoso para nuestros cachorros y sus madres. Más allá de las formalidades burocráticas y los documentos legales, es el profundo amor por los animales lo que guía nuestro camino, asegurando que cada cachorro que criamos tenga el mejor comienzo en la vida que les espera. Desde luego cumplimos de forma estricta la legalidad y nos gustaría impulsar que fuera obligatorio que todo criador deba responsabilizarse de los animales que han salido de sus manos de por vida, es decir, que si una familia no puede hacerse cargo del perrito por un divorcio, un cambio de vida, o laboral, o cualquier motivo, este garantizado que nunca va a existir un abandono.